Por Tiara Mendoza Pérez
¿Cuál ha sido el texto que nos ha entumecido o nos ha invitado a romper el silencio? Un ejemplo de potencia, denuncia son las palabras de Audre Lorde.
Audre fue una feminista y escritora afroamericana, nació el 18 de febrero de 1934 en Nueva York. A lo largo de su vida escribió poesía y textos diversos, a través de los cuáles relató su vida y lucha.
Sus palabras insumisas trascendieron el papel, logró entrelazar lo enunciativo, acusativo y poético. Un ejercicio para poner en evidencia el racismo, una realidad opresiva y violenta, por medio del lenguaje. Asimismo, nos invita en su texto “La transformación del silencio en lenguaje y en acción” a sentir, repensarnos, a disputar nuestro poder de palabra, retomar nuestro lenguaje, porque “hemos sido educadas para respetar más al miedo que a nuestra necesidad del lenguaje y definición, pero si permanecemos en silencio a que llegue la valentía, el peso del silencio nos ahogará”.
Es importante reconocer en Audre una sujeta poética, parte de un contexto espacial, temporal y geográficamente situado. Utilizó la poesía y la narrativa como expresión potente, para significarnos su lucha: ideas, valores, visiones, percepciones, compartidas por toda una comunidad de mujeres
A través de su narrativa y poesía demostró las injusticias de su época con miras a transformar, supo que “la transformación del lenguaje en acción era un acto de auto-revelación y eso parece siempre estar lleno de peligros”. En definitiva, sus escritos contribuyeron a registrar la memoria colectiva de muchas feministas, lesbianas, negras. Pero también es una muestra de la denuncia y potencia de las mujeres.