Por Montserrat Pérez
Marbella Ibarra Flores desapareció el 19 de septiembre de 2018. No se supo nada de ella hasta el día 15 de octubre, cuando se descubre su cuerpo en Rosarito, Baja California. Marbella fue asesinada. Pero su legado para el fútbol femenil es histórico.
Marbella fue fundadora del equipo Xolas de Tijuana, entrenadora, directora deportiva y precursora de la liga profesional de mujeres en México, uno de los proyectos más ambiciosos en un país en el que el deporte se ve como algo de hombres.
A Marbella le decían «Mar» cariñosamente. Enfrentó dificultades como la búsqueda de recursos para que el equipo pudiera participar en distintos torneos pues el club Xolos (Club Tijuana Xoloitzcuintles de Caliente), brindaba el nombre y la mitad de los gastos para su rama femenina. Xolas se funda en 2014 y fue el primer equipo femenil profesional de México.
Sobre ella, cuenta Fabiola Ibarra, futbolista, en entrevista con Marca: «Cuando nombraron lo de la liga, fue una satisfacción muy grande para ella, pues venía luchando desde hace mucho tiempo para que eso ocurriera y siempre trató de apoyarnos. Cuando inició lo de la liga, estaba haciendo una fundación con la que ayudó a varias jugadoras para que fueran con los clubes a que hicieran visorias o trataba de conseguir ella para los transportes u hoteles y nosotras la ayudamos a difundir su página para que las chavas se dieran cuenta que podían tener el apoyo de Mar«.
La liga profesional se funda en 2016 y ella sale de la dirección técnica de Xolas en 2017, pero continúa con su labor a través de apoyo a las futbolistas mexicanas. Entendía la necesidad de generar condiciones dignas para las jugadoras y para la liga, como lo expresó hace unos años en entrevista con El Financiero: «Cuando yo jugaba no había campos ni uniformes. No íbamos a torneos porque no teníamos recursos. Hoy quiero que mi equipo no sufra esas carencias”.
En la página web de Xolos no hay mención sobre Mar, incluso cuando la nota más reciente que tiene el sitio es del 18 de octubre, días después del anuncio de su asesinato.
A pesar de la falta de reconocimiento de su labor o la minimización de lo que significa una liga femenil de fútbol en México, la labor de Mar es histórica y fundamental en un mundo en el que las mujeres solemos pensar que hay espacios que no se abrirán para nosotras. Mar rompió con eso: organizó equipos, buscó recursos, se dedicó a decirle a las mujeres que podían volver sus sueños realidad y las acompañó en ese camino. Marbella es grande y será recordada así.