Feminismo
Estigmas impiden justicia a mujeres víctimas del crimen organizado
Por Susana Rodríguez
*Este texto fue publicado originalmente por el Observatorio de Violencia Social y de Género de Aguascalientes en el sitio Observatorio Digital el 7 de julio de 2021
La estigmatización social hacia Claudia Elizabeth Soria Mata -la octava víctima de feminicidio en Aguascalientes en lo que va del 2021- complicará la debida investigación con el protocolo correspondiente por ser considerada de manera coloquial como “vendedora de droga”.
La tarde de este martes 6 de julio, Claudia, de 40 años de edad, fue asesinada al interior de su casa por hombres que, según el reporte de los medios de comunicación locales, transitaban en camionetas blancas que se detuvieron frente al domicilio de la víctima, ubicado en la calle Artículo 123, de la colonia Constitución, para disparar hasta dejarla sin vida.
Sin hablar de la situación económica, familiar y emocional de la víctima, los medios empezaron a describirla por sus antecedentes penales relacionados con delitos contra la salud y venta de drogas, con esa versión aseguraban que las y los vecinos del lugar decían que su muerte era de esperarse.
En una entrevista hecha por Insight Crime en julio de 2020 a María Salguero, geofísica creadora del Mapa Nacional del Feminicidio en México, la especialista explica el estigma que sufren las mujeres asesinadas y vinculadas al narcotráfico.
“Pareciera que estas muertes no cuentan para el gobierno, las muertes violentas por este tipo de asesinatos como que no cuentan, se olvidan de este tipo de violencia”, explicó.
Agregó que no existen políticas públicas para prevenir este tipo de feminicidios, en donde la mayoría de las víctimas son mujeres pobres, que viven en situación de desigualdad, no tienen acceso a estudios ni a un trabajo bien remunerado.
De acuerdo al análisis Breve panorama sobre la violencia feminicida y los feminicidios en México, publicado por el Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República en abril del 2021, durante el 2007 en México asesinaron a 3 mujeres diarias, en total anual fue de mil 83 asesinadas. Mientras que en el 2008 siete mujeres al día fueron víctimas de feminicidio, lo que arrojó un total de 2 mil 713 mujeres al finalizar el año. A partir del 2019, en el país, un promedio de 10 mujeres son asesinadas al día.
Una nota de una publicación digital hace mención de que el incremento de los asesinatos de mujeres en México a partir del 2008 coincide con el inicio de la “Guerra contra el narco” promovida por el expresidente panista Felipe Calderón Hinojosa.
La Fiscalía General del Estado, a través de su área de comunicación, argumentó que el asesinato de Claudia Soria Mata está en proceso de investigación bajo el protocolo de feminicidio por ser una muerte violenta, sin embargo, hasta la publicación de esta información la autoridad aún no establece que se trata de un feminicidio. La causa de la muerte fueron las heridas producidas por el arma de fuego.
“No podemos deslegitimar que una mujer haya sido víctima de violencia feminicida por la actividad a la que se dedicaba antes de la privación de su vida, es necesario que se activen los protocolos al igual que cualquier muerte violenta”, argumentó Violeta Sabás Díaz de León, coordinadora del Observatorio de Violencia Social y de Género de Aguascalientes (OVSGA).
Para Sabás Díaz de León las autoridades pierden de vista que existe un acto de apropiación del cuerpo de las mujeres para el crimen, donde ellas se consideran parte de los territorios en disputa entre los cárteles.
Más allá de las causales propias del feminicidio en Aguascalientes cómo la relación de pareja y la exhibición pública de los cuerpos de mujeres asesinadas, es indispensable que las autoridades analicen la violencia política, social y en este caso la generada a partir de la “guerra contra el narco” para determinar cómo las mujeres son víctimas de una violencia estructural.