Cosas que quisiera haber escuchado de niña

Por Montserrat Pérez Campos

 

En el marco de la celebración del día de las niñas y los niños (usualmente conocido como día del niño) el 30 de abril, quiero compartir algunas cosas que quisiera haber escuchado de niña. Crecí en la década de los 90’ y aunque creo que hubo muchos avances en materia de crianzas, también fue una época muy violenta para las niñas y las adolescentes en cuestión del aspecto físico.

1. Puedes comer sin culpa, eres una niña, ¿por qué sentirías culpa al comer? Tu peso no define quién eres como persona, no es lo más importante ni hará que mágicamente seas feliz. La felicidad no está en eso.
2. Las otras niñas no son tus enemigas y tú no eres su enemiga. Toda esa competencia es innecesaria y dañina a largo plazo. ¿Por qué tenemos que pelear o lastimarnos unas a otras? Igual recuerda que eso no significa que no debes defenderte si te agreden.
3. Las revistas y la tele te muestran expectativas de vida y del ser que son falsas, no necesitas casi nada de lo que venden ahí, mucho menos una aspiración de vida que está alejada de lo que ves y experimentas todos los días. ¿Qué quieres tú para ti? ¿Cómo te imaginas tu futuro?
4. Mereces ser tratada con respeto y dignidad. Nadie, ni maestras, maestros o personas adultas a tu alrededor deben gritarte o hablarte con desprecio. La burla también es una forma de lastimarte, no te rías de chistes a costa de ti ni participes en reírte de otras personas.
5. Aunque tengas un cuerpo más grande que el de las demás, aún eres una niña. No eres más madura, no debes hacerte responsable de las personas a tu alrededor, mereces tener tiempo de jugar y que haya espacios para ti. Mereces ternura y cariño, suavidad y crecer a tu ritmo.
6. ¡Protege tu “NO”! No dejes que te quiten tu capacidad de negarte a hacer cosas que no quieres o que sabes que son malas para ti. No pasa nada si se enojan, mi mamá diría que tendrán que “hacer como los frijoles y arrugarse y desarrugarse solos”. Esto es parte de saber poner límites y que quienes te rodean los conozcan y los respeten. Tú también deberás respetar los límites de las demás y eso está bien. Te ayudará a tener relaciones más saludables.
7. Participa en actividades que te llamen la atención. La única manera de saber si puedes o no puedes hacer algo, es explorarlo. ¿Quieres bailar? Baila. ¿Quieres escribir? Escribe. ¿Quieres participar en algún deporte o actividad física? Hazlo. Actualmente ya hay espacios diseñados por mujeres amables y que están dirigidos a niñas y mujeres jóvenes.
8. Nada, absolutamente nada, merece que dejes tu salud. Sí, la escuela es importante, pero no es lo único. Puedes echarle ganas a las clases, pero también puedes disfrutar el tiempo con tus amigas o haciendo cosas que a ti te gusten. Aprenderás mejor si estás tranquila.
9. El autocuidado no tiene nada que ver con hacer dietas ni modificar tu apariencia. Cuidar de ti misma implica tener una buena relación con la comida, con el movimiento, con la diversión, con la higiene, con dormir bien y otros muchos aspectos que descubrirás poco a poco.
10. No es tu culpa si en casa falta comida o dinero o hay peleas. Puedes pedir ayuda en casos de violencia o agresiones. Los secretos y silencios de tu familia no son tuyos.

Seguramente hay más puntos que podría comentar, así como también hay cosas que otras vivieron y que complementarían perfecto esta pequeña lista, pero lo más importante es que las niñas merecen mucho más de lo que este mundo ofrece. Este texto me lo escribo a mí y a todas las que lo necesiten. A todas las que crecieron con mucho miedo o mucha tristeza por ser niñas que parecían no encajar en el mundo. No fuimos nosotras, no somos nosotras. Ojalá podamos sanar y ser adultas en las que las niñas confíen y que sepan que nosotras siempre estaremos de su lado.