Por La Crítica
Ciudad de México, 27 de diciembre de 2018.-
Una de las joyas que nos dejó este 2018 fue el monólogo cómico de Nanette que la comediante lesbiana Hanna Gadsby presentó en televisión de paga y en la que reflexiona sarcástica y directamente sobre la importancia de cambiar la forma de hacer comedia, especialmente sobre las lesbianas y las mujeres.
La australiana de 40 años de edad dijo en entrevista al The New York Times que escribió esta comedia en 2016 después de haber sido diagnosticada con autismo y luego de reconocer que los hombres escalaban profesionalmente más rápido que ella. “Me apena admitir que surgió de un lugar de mayor amargura. Hago lo que ellos, y probablemente mejor, y desde una posición más difícil”, declaró al medio.
El monólogo Nanette, uno de los contenidos más populares de Netflix este año, trata sobre la lesbiandad, la misoginia en la comedia y el arte, la violencia sexual contra menores, el enojo, la resistencia de las mujeres, entre otros temas. La presentación en vivo del monólogo fue en sí mismo un reto para la también historiadora del arte, ya que su mamá se enteró en vivo y al mismo tiempo que las y los espectadores de las diferentes agresiones físicas y sexuales que ha vivido por ser lesbiana. Sin embargo, según dijo al medio estadounidense: “parte de lo que deshace la vergüenza es ser escuchada y ser vista. Es importante empezar a pensar en las maneras en las que podemos ayudar a sobrellevar estas historias, a establecer un marco para que las personas no deban hacerlo solas”.
Para que cierres con mucha fuerza el año, te dejamos un recuento en español de las frases más contundentes de Nanette, el Stand Up más exitoso de Netflix este año:
1.- “Nadie habla sobre las lesbianas (…) Por mucho tiempo tuve más información de los unicornios que de las lesbianas. Otra motivo por el que me costó… no hay información sobre los unicornios“
2.- “No soy suficientemente lesbiana. Debería renunciar. Soy una vergüenza. ¿Qué clase de comediante no puede hacer reír a las lesbianas?… Todos los comediantes que existen.”
3.- “Construí mi carrera en base a chistes de autocrítica. En eso se basa mi carrera. Y no quería seguir haciéndolo. Porque ¿entienden qué significa la autocrítica para alguien que ya de por sí está marginada? No es humildad. Es humillación.”
4.- “Hablo mal de mi misma para poder hablar, en busca de permiso para hablar. Ya no volveré a hacerlo. No volveré a hacérmelo a mí ni a nadie que se identifique conmigo. Si eso significa el fin de mi carrera que así sea.”
5.- “¿Saben qué es raro? Que les pongan diademas a las bebes calvas. Entiendo que les asusta que confundan a su hermosa bebé con un niño por culpa de la calvicie. Pero yo no supongo que los bebés calvos son varones, supongo que son feministas enojadas y las trato con respeto.”
6. “Una aprende de la parte de la historia en la que se centra. Debo contar mi historia como se debe. Porque no me resultó fácil salir del armario. De 1989 a hasta 1997. Son 10 años. Toda mi adolescencia. Tasmania estaba en el centro de un debate nacional muy tóxico sobre la homosexualidad y su legalización. Soy de la costa noroeste de Tasmania, del ‘Cinturón bíblico”. El 70% de las personas de mi zona creían que la homosexualidad debía considerarse un delito. El 70% de las personas que me criaron, cuidaron y amaron creían que la homosexualidad era un pecado… y que los homosexuales eran pedófilos atroces e infrahumanos. El 70%. Cuando me di cuenta de que era gay, ya era muy tarde. Ya era homofobica. Y es imposible cambiar de opinión con un chasquido. Así que una asimila la homofobia y aprende a odiarse a sí misma.”
7.- “Me quedé encerrada y cubierta de vergüenza… en ese armario durante 10 años. El armario sólo te oculta. No impide que sientas vergüenza. Cuando un niño se cubre de vergüenza no puede desarrollar las vías neurológicas que conducen los pensamientos de autoestima. No los desarrolla. El odio a una misma es una semilla que te plantan desde afuera pero cuando ocurre de pequeño la hierba se vuelve tan espesa y crece tan rápido que el niño cree que es así. Se vuelve tan natural como la gravedad. Cuando salí del armario no sabía ningún chiste. Lo único que sabía hacer era volverme invisible y odiarme. Me llevó 10 años más comprender que podía ocupar un lugar en el mundo, pero para entonces había tapado todo con bromas como si nada.”
8.- “¿Saben quién solía ser un remate fácil? Mónica Lewinsky. Si los comediantes hubieran hecho bien su trabajo y se hubieran burlado del hombre que se abusó de su poder, quizá ahora tendríamos a una mujer de mediana edad, con una cantidad adecuada de experiencia, en la Casa Blanca, en vez de tener a un hombre que admitió públicamente haber abusado sexualmente de chicas vulnerables porque podía.”
9.- “La historia es como ustedes la cuentan. El poder les pertenece. Y si no soportan la crítica, si no soportan una broma, ni pueden lidiar con la tensión sin llegar a la violencia, deberían preguntarse si son capaces de estar a cargo. No odio a los hombres. Les tengo miedo (…) No odio a los hombres pero me pregunto qué sentirían ellos si hubieran vivido mi vida. Porque fue un hombre quien abusó de mí de pequeña. Fue un hombre quien me cagó a patadas cuando tenía 17, ‘me mejor edad’. Fueron dos hombres quienes me violaron recién cumplidos los 20 años. Díganme por qué eso estuvo bien. Hubiera sido más humano que me llevaran a un maldito escampado y me pegaran un tiro si ser diferente es un delito tan grande. No les digo todo esto para hacerme la víctima. No soy una víctima. Se los digo porque mi historia tiene valor”.