Marcha contingente feminista contra crímenes de Estado

Foto: Autarquía

Por Violeta Ríos

El pasado jueves 20 de noviembre en la Ciudad de México, marcharon cientos de feministas y lesbofeministas en un contingente dentro de la cuarta marcha masiva convocada por madres y padres de estudiantes desaparecidos en Ayotzinapa en el marco de las jornadas denominadas Acción Global por Ayotzinapa. Varias colectivas y activistas convocaron a la conformación de un contingente feminista para asistir a la marcha. Las principales motivaciones para convocar un contingente feminista son la denuncia a las consignas machistas y misóginas que en estas movilizaciones se han mantenido, y la denuncia de los feminicidios, también crímenes de estado, que son sistemáticamente invisibilizados, además de mostrar su solidaridad con el movimiento. El contingente se dio cita a las 16:00 horas a espaldas del monumento a la independencia, y se incorporó a la marcha alrededor de las 17 horas. Acompañadas por una batucada, cruces rosas, mantas y un listado de consignas feministas, el contingente avanzó por reforma hasta el zócalo, enunciando sus demandas y visibilizando los feminicidios de toda la república: el Estado de México, Veracruz, el Distrito Federal y también Guerrero. Muchas de las cruces llevaban las fotografías y los nombres de algunas de las mujeres que han sido víctimas de feminicidio en nuestro país. Dentro de este contingente se encontraba también un contingente de lesbofeministas que cantaban consignas tales como «Lesbianas contra la guerra, lesbianas contra el capital, lesbianas contra el machismo, contra el terrorismo neoliberal» y «No son muertas, son asesinadas». En sus mantas y consignas se leía la insistencia en no hablar desde la muerte y el dolor, y sustituir la extendida frase «Ni una más» por «Ni una menos» agregando que es mejor «movernos desde la vida».