Por Leonor Casas
En el sitio Machos a la hoguera, circula desde principios de agosto de este 2014 una denuncia pública contra el artista gráfico oaxaqueño César Chávez, integrante del colectivo ASARO (Asamblea de Artistas Revolucionarios de Oaxaca) y del proyecto Chikatana. El sitio informa que actualmente el artista se encuentra en un proceso legal por violación y cuenta con fotografías de las intervenciones públicas que se han hecho para denunciar el caso, como graffitis y carteles.
En el sitio se puede leer: «A pesar de que él mismo ha reconocido que es culpable, no ha habido ninguna consecuencia en su contra. Existe una red de complicidad violenta que lo está protegiendo y que se aprovecha de su participación en el movimiento social para asegurar su impunidad. Son cómplices del agresor y hostigadores de la sobreviviente que buscan a toda costa callar la voz de quien fue violada por temor a que su reputación, su trabajo y el financiamiento del que dependen se vean afectados».
Por su parte, ASARO emitió un comunicado para aclarar su postura con respecto a uno de sus integrantes: «No entendemos por qué una acusación en el ámbito de la vida privada de una persona, que debe resolverse ante la justicia, se extiende a sus colaboradores de trabajo y / o amigos, sólo por el hecho de serlo. Tampoco entendemos por qué no se respeta el principio de presunción de inocencia ni en qué se basan estas personas para llamarnos a todos violadores».
El comunicado, que se puede consultar en Proyecto Ambulante, es firmado por Asaro, Chikatana Colectivo Siqueiros, Gorilla Glass Gallery y Espacio Zapata, y concluye: «Somos conscientes de haber crecido y haber sido educados en una sociedad machista y patriarcal. Pero eso no nos hace violadores ni defensores de los que agreden a las mujeres. Repudiamos cualquier acto de violencia física, sexual y psicológica hacia cualquier mujer».